¿A dónde van las tarjetas de negocio?

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Coincido plenamente con Algoparapensar en el sentido que las buenas tarjetas estan hechas para sorprender, gustar e informar, en ese orden; nada se compara a esa sensación de dar o recibir una BUENA tarjeta de negocios, si estamos en condicion de dar una, es que hemos logrado conciliar nuestro siempre exigente y disconforme gusto para con las cosas hechas para uno mismo, y si recibimos una buena tarjeta la apreciaremos y valoraremos con los ojos del comunicador visual y la tendremos presente.
No creo que se pueda reemplazar ese ritual de intercambiar tarjetas con el nuevo cliente, con un encargado de negocios de una cuenta, con el amigo empresario que encuentras despues de mucho tiempo y sorprenderlos gratamente.
No quiero decir con esto que no debamos tener la apertura mental para dar paso a las nuevas tendencias, pero este tema de las tarjetas en especial tiene sus particularidades.
Un ejemplo; acabamos de adquirir una máquina para grabados láser, asi que para promocionar este nuevo servicio que brindaremos pues hice unas tarjetas grabadas en laser sobre madera y sobre policarbonato en el mismo formato que las tarjetas habituales; asi ahorraremos muchas explicaciones, la tarjeta misma es una muestra del trabajo que puede hacer esta máquina.