colaboración

[metacortex]

Éste es un tópico excelente ya que toca una duda que en algún momento nos ha llegado a todos. Un aspecto muy a tomar en cuenta es el cliente y su conveniencia. Éste se ha inventado mil y un formas de contratación, poniendo en primer lugar su economía. Jugar al juego del cliente (en su terreno) significa una posible frustración para el diseñador.

Nosotros como proveedores de servicios tenemos nuestros intereses, necesidades y forma de hacer el trabajo. Muchas veces el cliente cree que ya ha decidido eso por nosotros. Quizás nuestra necesidad por el contrato nos cohiba de poner en la mesa nuestras condiciones, pero lo cierto es que tenemos que hacerlo. No nos convirtamos en autómatas que dicen sí a todo sólo para obtener la aprobación.

De hecho, mientras más firmeza mostremos, más confianza generamos en el cliente.

En cuanto a la pregunta inicial, el mejor método que he conocido para contratos freelance es una cotización por proyecto. Proyectos complejos, presupuestos más altos. Proyectos seguidos se rebaja un porcentaje por proyecto, pero nunca coticen en lote, siempre vayan a lo individual.

Recordemos que como freelence no gozamos de un seguro laboral, bonos de distintos tipos, etc. y por lo tanto tenemos que administrarnos de tal forma que podamos cubrir esos gastos. No es precisamente un argumento que se le puede exponer al cliente, puesto que no le interesa. Por lo tanto los primeros interesados en nuestro bienestar debemos ser nosotros mismos.

Hay una razón principal por la cual una persona decide ser freelance. Y no es la capacidad de administrar nuestro tiempo. La razón principal es ganar más dinero que un empleado. Un freelence profesional no es un empleado, sencillamente porque ninguna empresa podría pagarle el monto que actualmente gana. Así de sencillo.

Si un freelance gana poco o se conforma con poco, estaría mejor como empleado. Precisamente asumimos la responsabilidad de la auto-administración porque la recompensa monetaria es atractiva. A la hora de presupuestar piensen en esto y no declinen. Si un cliente quiere explotarlos mándenlo a pasear, no sirve, que se busque otro pendejo. Una sana autoestima profesional les dará muchos dividendos y les hará el trabajo más agradable, además de procurarles mejores clientes.

Bueno es mi opinión y lo que me ha funcionado hasta ahora.