El problema que veo con los .catalonia así como los vi en su momento con los .cat o ahora con los .madrid, etc, es que están reducidos sólo a una provincia.
¿Cuánta gente de esa provincia o región puede llegar a comprar esa extensión?
Será en todo caso un pequeño número frente a los miles millones que preferirán emplear una extensión de primer nivel y dominios más conocidos como los .com .org .net, etc.
Pero bueno, siguiendo con el símil de la política... Que siempre salgan elegidos los mismos partidos (.com, .org, .net) no quiere decir que no tenga que haber pluralidad con otros partidos más minoritarios (.catalonia, .madrid).
