Pues este le sucedió a un amigo (no vayan a pensar que a mi!
) que por quedar bien con su novia en turno, accedió a conectar el disco duro de la máquina de su amor
en la suya para ayudarle a rescatar los archivos de su tesis que quedaron atrapados al corromperse al sistema operativo, en fin, al parecer nada del otro mundo... asi es que abró el gabinete... perdón!!! abré mi amigo el gabinete, conecta el disco como exclavo, lo deja recargado sobre el metal del gabinete, (al fin que sólo era un momento, no hacia falta fijar el disco duro) enciende la PC y...
ALGO SALTO DISPARADO!!!
e inmediatamente el olor a quemado!!!, apagué... perdón... apagó mi amigo inmediatamente el equipo y desconecto el disco para revisar los daños, en resumen: un chip carbonizado y un transistor que se convirtió en proyectil
Era medio día... mi chica... la chica de mi amigo... regresaría después de las 17 horas de la escuela... así que sólo tenía él una opción: correr!!!
Pero como es un tipo valiente corrió a la calle de República del Salvador (para los que viven fuera del D.F.- México, en esta calle se encuentra pedacería de todo tipo de electrónica) y consiguó, por suerte, un disco duro del mismo tipo que ya no servía, pero cuya tarjeta lógica parecía intacta.
Así es que con el disco duro de reemplazo en mano regreso a casa, apenas con tiempo para hacer el cambió de tarjeta lógica y comer algo
(ok, tenía hambre y las emociones fuertes le provocaban más!!!)
Cambió la tarjeta, conectó el disco duro Frankenstein a la PC, lo colocó en el gabinete con sumo cuidado de que no hiciera contacto con ninguna superficie metálica, encendió el equipo y.....
funcionó!!!
Al final llegó la novia mientras seguían descargandose sus archivos a mi disco duro... al disco duro de mi amigo.
Moraleja: Una vez que la novia se recibió con honores y se consiguió un empleo en un despacho administrativo y contable, cambió al técnico en computadoras balín por su jefe en turno. Nadie sabe para quién trabaja.
